La ciudad de Copacabana, lado Boliviano del Titikaka, es mucho más pequeña, pero más bonita y con mucha más onda...Ahi daban ganas de quedarse unos días a hacer relax total, porque es un pueblito muuuuyyyy tranquilo....
Al día siguiente de llegar me embarqué hacia la isla más bonita del lado boliviano, que es la isla del Sol con la idea de pasar la noche, ya que me habían comentado que los atardeceres ahi son increíbles...
Cuando llegué con todo el equipaje ( y ahora estoy mucho mas cargada), tuve que subir toda una colina para buscar alojamiento, ya que el 99% de los lugares están ahi arriba...No me había recuperado todavía de lo de machu Pichu, y ya estaba de nuevo haciendo malabares, y encima con caSI 20 kilos en la espalda y algunos bultos más. No les explico lo que tardé en llegar y cómo llegué...
Pero conseguí un lugarcito, conocí unas chicas alemanas, y pude ver el hermoso atardecer mientras nos disponíamos a comer trucha del lago...La verdad que valió totalmente la pena subir hasta ahi...Un atardecer maravilloso...
A la noche dormi, ya no como un angelito, sino como un tronco, y amanecí bien tempranito al siguente día, para ir a recorrer un poco más...
Cuando volví a tomar el barco de vuelta hacia Copacabana a la mañana siguiente ya estaba pensando que no quería más ruinas, más escaleras, ni colinas...
Luego, ese mismo día, de nuevo un bus hacia Puno, donde me quedé a pasar la noche, y al día siguiente, por la mañana, un bus hacia Arequipa, desde donde estoy escribiendo ahora...
Y asi estoy, de bus en bus, para poder llegar al lugar desde donde voy a volar de nuevo hacia Buenos Aires...
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